Me desperté temprano, supongo, aunque no te puedes guiar por
las luces, la ciudad parece igual de iluminada de noche que de día. Entonces me
di cuenta de qué me había despertado. Alguien estaba llamando a la puerta.
-¿Si? ¿Quién es?-dije adormilada.
-Soy Tiberius, es hora de despertar, te espera un día muy
interesante.-me respondió Tiberius desde el otro lado de la puerta.
Me levanté y me puse la ropa que me habían dejado. Una
especie de mono negro, con el número de mi distrito a la espalda. Parece que
aquí todo se clasifica por distritos. Salgo de mi cuarto y me dirijo al
comedor. Solo esta Nooria, con cara de dormida, apoyada en la mesa, removiendo
un café.
-¡Hola!-me dice y parece espabilarse al verme.
-Buenos días-le contesto.
Me siento a la mesa y me pongo chocolate caliente. Hacía
tanto que no lo tomaba, desde antes de la guerra. Un poco después aparecen
Tiberius y Alsan.
-Ahora que estamos todos aquí, voy a deciros lo que vais a
hacer estos días chicos.-empieza Tiberius- Tenéis dos días de entrenamiento con
el resto de tributos, y luego una sesión privada con los vigilantes, en la que
os puntuarán entre 0 y 12.
-Intentad aprended todo lo que podáis estos días.-comenta
Nooria- Y haced algunos amigos, quizás será bueno aliarse en la Arena.
-Os acompañaré a la sala de entrenamiento-dice Tiberius.
Los tres nos levantamos y nos dirigimos al ascensor. Me doy
cuenta de que Alsan lleva un traje igual que el mío. Cuando llegamos a la sala
de entrenamiento, Tiberius se despide y nos bajamos. Allí ya están algunos
tributos, por lo que dicen sus trajes, los del distrito 3, 8, 10 y 12. Alsan y
yo nos acercamos al resto, que están en un círculo alrededor de una mujer.
-Como os decía, cuando estéis todos, o sobre las 10
empezaremos. Pero vamos a esperar un poquito más.-dice la mujer.
Al poco rato, llegan más tributos, distrito 4, 1... La chica
del distrito 2, Prudence, me sonríe al verme, y yo, esta vez sí, le sonrío
también. Cuando estamos todos, la mujer empieza a hablar:
-Bueno tributos, os esperan dos grandes días, que podéis
aprovechar. Hay diferentes puestos, de armas, de frutas, de nudos... Habrá un
monitor en cada puesto para ayudaros y enseñaros, probad un poco de todo. Empezad.
Todos los tributos se van yendo poco a poco a un puesto.
-¿Qué quieres hacer?-le pregunto a Alsan.
-No sé, probemos un poco de todo. ¿Te parece empezar por los
nudos?-contesta él.
Vamos al puesto de nudos, al de hacer hogueras, al de
camuflaje. Nos dirigimos al especializado en plantas. Allí está la chica del 2
y los dos del 8. Parece que Josh, el chico del 2, está en el de lanzas. El
monitor nos da una charla, sobre plantas venenosas, curativas, comestibles... Y
hacemos pruebas, probamos algunas, intentamos identificar otras. A mí me
resulta bastante fácil, aunque parece que Alsan tiene algunos problemas. El
monitor me felicita y Pruedence, que habla mucho con el chico del distrito 8
(creo que se llama Daren), mi mira un poco.
Luego nos dirigimos a los puestos de lanzas, cuchillos,
espadas, son difíciles, pero creo que me las apañaré. En el de arco me quedo
sorprendida. Yo no soy capaz de darle a nada, pero Alsan parece estar en su
elemento. No falla una. Es asombroso. Como si el arco fuera una expansión de su
cuerpo.
Cuando termina, me paro un momento a ver que hacen los demás.
En el puesto de lanzas, está el distrito 1 y el 6. Con la pesca, el 12 y el 8.
Con las plantas el 7. Con los cuchillos y eso, el 2. Parece que el chico le
está enseñando a disparar cuchillos a Pruedence, aunque a esta no se le da mal.
Creo que es una escusa para agarrarle la mano. Sin darme cuenta, pienso en cómo
sería que Alsan hiciera eso conmigo. Agarrarme la mano para enseñarme a hacer
algo... ¡Pero qué digo! Alsan es solo un amigo, nada más. Estoy pensando eso
cuando los vigilantes, las personas que 'supervisan' y puntúan nuestro
entrenamiento, dicen que es hora de comer.
Nos dirigimos al comedor que hay, y, tras recoger la comida,
nos dirigimos cada uno a una mesa.
Alsan y yo nos sentamos en una mesa vacía, en esto que vienen
los tributos del 2 y del 8.
-¿Podemos sentarnos con vosotros?-pregunta Pruedence.
-Esto es de todos, haced lo que queráis.-le contesta Alsan.
Ellos se sientan, y Prudence los presenta.
-Soy Prue y este es Josh, como os dije ayer.-dice ella. Me
parece que a Josh no le hace gracia estar aquí.- Y ella es Melody y él,
Daren.-ambos saludan.
-Pasamos una comida bastante alegre, son gente amable,
especialmente Prue y Daren.
Cuando terminamos de comer, volvemos a entrenar. Al final del
entrenamiento, estoy reventada. Subimos a nuestra planta. Allí está todo listo
para cenar. Menos mal. Nos sentamos todos a la mesa, Tiberius y Nooria con
nosotros.
-¿Cómo os ha ido?-pregunta Nooria.
Le contamos como ha sido el día, lo bien que se me dan las
plantas, lo bien que se le da a Alsan el arco y como fue la comida.
-Parecen simpáticos, creo que quieren aliarse con
nosotros.-comento yo, hablando de Prue, Josh, Daren y Melody.
-No sé, hablaremos con sus mentores.-dice Tiberius- Pero
mejor después del entrenamiento de mañana, para estar seguros.
-Me parece bien.-dice Alsan, aunque no parece muy convencido.
Como es tarde y estoy cansada, me voy a dormir, Tiberius,
Nooria y Alsan se quedan un rato más despiertos. Pero yo estoy que me caigo de
sueño.
Voy a mi habitación, me ducho y me pongo un pijama.
Me cuesta mucho dormirme, no paro de dar vueltas, y cuando
consigo dormirme, sueño con aquel pensamiento, el de Alsan agarrándome de la
mano para enseñarme a hacer algo. Me despierto sobresaltada. ¿Por qué pensaré
esas cosas? ¿Me gusta Alsan? Hasta ahora era solo un amigo, casi un hermano.
Pero no se... Supongo que hemos pasado muchas cosas juntos. Es un tema
demasiado mareante ahora mismo. Prefiero que las cosas pasen solas, y que pase
lo que deba pasar. Vuelvo a intentar dormirme. Y esta vez, lo consigo.
Me gusta! :D
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